En el mar vecino

Hoy me despertó un fuerte malentendido;

yo quería trabajar en vivir,

y la vida me mandaba a trabajar.

La sobra era oscura,

y yo no quería despertar.

Si hubiera otro como yo

no cabríamos en la cama.

Dos gordos perfumados

la reventarían de tanta poesía.

Hoy vomito, si no en tu cama, 

por lo menos en la mía.

¡No te pierdas las últimas poesías!

¡No hacemos spam! Lee nuestra política de privacidad para obtener más información.

Comparte el arte

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.